¡Muévete!
La actividad física es un reto en estas circunstancias, depende de tu salud, tu rutina anterior de ejercicio y de lo que te permite el lugar en donde vives. Para sopesar la posible falta de ganas, es un buen momento para recordarte algunos de sus beneficios: protege tu salud cardiovascular, ósea y articular, mejora sensibilidad a la insulina, tiene un efecto anti-inflamatorio por lo que empodera tu sistema inmune, aumenta el gasto metabólico, mejora el estado ánimo, ayuda a lidiar con el estrés y la ansiedad, aumenta el flujo de nutrientes al cerebro, la creatividad, la concentración…. En fin: ¡Muévete!
La recomendación de la OMS es hacer 30 minutos diarios de ejercicio aeróbico de intensidad moderada, 5 veces a la semana + por lo menos 2 veces a la semana de ejercicio de fuerza muscular; lo que yo recomiendo en este período de “quédate en casa”, es que hagas lo que puedas, pero que hagas algo todos los días y recuerda estirar. Ahora hay infinidad de opciones.
para hacer en casa, entrenos guiados de todo tipo, para todas las necesidades, opciones gratuitas; así que explora, experimenta y anímate.